Un poco de esto

lunes, 3 de diciembre de 2012

Pensamiento Lateral

Desde que nacemos aprendemos a ver y entender las cosas de una sola manera. 

Galileo Galilei afirmó que la tierra giraba alrededor del sol, y no al revés. Todo el mundo lo humilló. ¿Cómo podía afirmar semejante desatino? Si todos veían, claramente, que el sol era el que se movía y no la tierra. Muchos acusaron de loco a Colón cuando supuso que la tierra era redonda. Si todos veían claramente que la tierra era plana. En su época, le gente disfrutaba de los libros de Julio Verne, aunque para todos era un autor fantasioso. ¿A quién se le podía ocurrir, en aquel momento, que una nave podía viajar debajo del agua, o que se podía viajar a la luna?
 Pero cuando nos animamos a pensar diferente, aparecen soluciones diferentes. 
A veces, para llegar a algún lugar, hay que dar rodeos, ir y venir. En general, solo confiamos en nuestros ojos, cuando tenemos más sentidos. A veces no es viendo, sino tocando, oliendo, escuchando o degustando que se resuelve algo. Entendemos las palabras de una sola manera. Una eminencia es un hombre para todos. ¿Por qué una eminencia no puede ser una mujer? Dejar de lado la única manera que tenemos de ver el mundo...
Bueno, de eso se trata el pensamiento lateral. Nada tiene una única solución. No todo es lo que vemos con los ojos. Por algo tenemos otros cuatro sentidos más. Simplemente tenemos que animarnos a usarlos, y aprender a ver. A ver con los otros sentidos. No todo es lo que vemos con los ojos, siempre hay más. Mucho más. Simplemente, hay que aprender a ver.


miércoles, 28 de noviembre de 2012

"La Mala de la Película"

Cuando tenes un dilema ya no se trata de que quieres elegir sino de que prefieres perder.
Una elección es decidir entre dos cosas buenas, pero un dilema es elegir entre dos malas.
¿Qué perder? De eso se trata un dilema. Definir cuál es la pérdida más soportable.
Sabes que eres el malo de la película, pero sabes también que tenes tus razones. Sabes que está tan mal hacerlo y tan mal no hacerlo.
Ser o no la mala de la novela ha sido mi dilema. Puede que sea un dilema menor al lado de otros pero tengo que elegir entre partirle el corazón a un amor para que no viva una mentira o dejarla vivir en su falsa felicidad.
Si un dilema es elegir entre dos males yo elijo el que puedo, el más tonto tal vez, elijo el mal del no hay tal crisis.
Nunca es claro quién es el malo de la película.
Incluso el malo de la película tiene su propio dilema, hace lo que hace porque tiene que elegir entre dos males.
Elegir que perder, de eso se tratan todos los dilemas. Soy confiada y doy oportunidades a la gente, porque se que todos tenemos dilemas, incluso los malos de la película.

miércoles, 20 de junio de 2012

INVIERNO


Cuando sabes la verdad puedes elegir que hacer con ella, puedes negarla o puedes aceptarla.Buscamos desesperadamente la verdad, esa misma verdad que nos da miedo escuchar.
Si niegas la verdad va a ser tu responsabilidad cuando te explote en las manos.
La verdad libera porque uno es dueño de hacer con ella lo que quiera, incluso negarla, pero yo no niego la verdad, es como un juego de mesa, si uno no pone un tiempo de juego es aburrido, por eso la vida es divertida, porque no dura para siempre.
Puedes vivir negándolo, pero lo único que vas a ganar es desperdiciar tu tiempo, tu vida.
Ya esta ya sabes la verdad, ahora no hay nada que ocultar.
La salida al peligro esta en el peligro mismo.
Ya sabemos la verdad, ahora podemos llorar, o podemos conservar la alegría.
La verdad nos interpela, nos pregunta, nos arrincona y muchas veces no hay respuesta.
La verdad a veces no da certezas, si no algo mucho mas peligroso, dudas.
La verdad asusta.
La verdad despierta, sacude y paraliza.
La verdad desnuda, incomoda.
La verdad libera y confunde.
Pero la verdad también nos da la fuerza para afrontarla con alegría.
La verdad es como el sol en la cara en una tarde de invierno, es un carnaval en la nieve.
La verdad aveces duele, pero sin lugar a dudas la verdad fue, es y sera la fiesta de todos.

viernes, 15 de junio de 2012

No me sueltes la Mano


No sé si lo recuerdo o me lo contaron, pero cuando era chiquita mi mamá me decía "dame la mano para cruzar la calle", y yo le decía "no, no te la doy, te la presto", porque dar la mano me sonaba a darla, sacármela y darla 

¿pero dar una mano no es un poco eso?

Dar una mano a alguien es mucho más que hacer un favor. No es dedicar unos minutos que te sobran o prestar una polera que no usas, es dar una parte tuya, es darte tu mismo.
Dar la mano es aferrarte y aferrar al otro. 

Cuando el mundo se vuelve un abismo y todo se cae, tus manos no se aferran a algo, se aferran a alguien, alguien que no te deja caer.
Cuando diste tu mano ya no hay forma de soltarla, ya no es tuya, está unida a la del otro, LAS DOS MANOS SON UNA.

Las manos nos unen, nos suman, cuando damos la mano dejamos de ser yo para ser nosotros.


Mi mano ya no es mía, es tuya, o nuestra. Nunca voy a soltarte la mano, pase lo que pase.

Memoria Inquieta


Se lo que quiero decir. Sé cómo se llaman mis amigos, pero cuando quiero decirlo mi memoria me juega una mala pasada y digo otra cosa.
Cuando te falla la memoria ¿Qué es lo que falla?Necesitas recordar la dirección de tu casa para saber a dónde volver. Necesitas recordar tu nombre para saber quién eres.
¿Por qué hay cosas que olvidamos y otros recuerdos que nos persiguen sin descanso? ¿Uno se aferra a los recuerdos, o los recuerdos se aferran a uno? Te atrapan y no te sueltan. ¿Qué quieren los recuerdos? ¿Por qué insiste tanto la memoria?
¿La memoria es el pasado que quiere seguir siendo presente?
Todo lo que vivimos se muere, se ahoga en el pasado. ¿La memoria es un manotazo de ahogado para que esas cosas no mueran?
La memoria tiene vida propia; no es uno, sino ella la que elige qué cosas deja morir en el olvido y qué cosas mantener vivas.
La memoria es como un rompecabezas, que te rompe la cabeza. Son como fichas, piezas sueltas que uno tiene que ir reacomodando..
La memoria siempre está en movimiento. Tener experiencia en realidad es tener buena memoria, es escuchar lo que nos susurran los recuerdos.

La memoria es una boxeadora que pelea contra el olvido: a veces tira la toalla y a veces gana por knockout, pero siempre lucha.
Una llave, eso es lo que buscamos cuando buscamos en la memoria. Una llave que nos ayude a salir del laberinto. Una llave que abra la puerta de nuestra propia identidad. Porque sobre todo, la memoria.. está viva.
La memoria es incansable, persistente y muy inquieta. Eso es lo peor, o lo mejor, de la memoria.
No sólo es inquieta.. sino que te inquieta.
Mi memoria falla y no sé por qué. Solo sé que la memoria inquieta, y mucho.

Hasta olvidarte


...Hay vivencias que aunque parezcan insignificantes nos marcan a fuego. Sensaciones que queremos repetir sea como sea, cosas que nadie más que tu puede entender.
Lo que nos define como personas es el modo que tenemos de sentir. Lo que nos define como hombres es cuanto nos animamos a sentir.

¿Puedes estar vivo si perdiste tu capacidad de sentir? Dejas de sentir y vas separándote de lo que alguna vez fuiste. Vas dejando de ser tu hasta olvidarte de quien eres.
¿Cómo haces para mirar adelante cuando tu vida quedó atrás?
Me duele su amor, su recuerdo, me duele acordarme de su cara, me duele no acordarme, me duele pensar que estará haciendo momento a momento.
Ayer éramos un equipo, nos completábamos, sin ella estaba vacío. Hoy tengo que arrancármela de la piel, odiarla hasta olvidarla.
Antes no sabía dónde estaba, ahora no sé dónde quedó, donde quedó Mar, mi Mar, mi fratacha, mi perna adorada, donde quedó…
Antes todo significaba Mar. Atardecer, hogar a leña, chocolate, DVD, perfume, medialunas, todo. Todo significa Mar. ¿Cómo hago para arrancarla de cada cosa, de cada pensamiento?
Tendré que enojarme, enojarme con cada recuerdo, con cada vivencia. Tendré que enojarme con cada cosa que me recuerde a Mar, enojarme hasta odiarla, y odiarla hasta olvidarme de ella.

El Soma

El mundo está lleno de soma. 
Para algunos su soma es el trabajo, se intoxican de trabajo para no tener que pensar en su propia vida. Es un ‘no hay tal crisis’ común, no? Que uno dice “ bueno dentro de todo es sano”, pero no, no es así para nada, de hecho no hay ninguna diferencia con un químico casi, uno busca no pensar, no sentir. 

Y la verdad es que al final todos necesitamos eso un poco.
Los atracones de chocolate en rama que me habré dado, llenar la boca, el estómago, el vacío, para que no haya lugar para ningún pensamiento ni ningún sentimiento, y ninguna pregunta, no? Porque esas preguntas son demasiado fuertes. 

Buscar la risa cuando el corazón nos pide llorar, esa es otra manera de soma. ¿Y quién puede juzgar algo así? Si lo hacemos todos.

 La realidad es tan fuerte, tan difícil de soportar a veces que todos necesitamos un poco de soma.
A veces usamos a otra persona como si fuera una aspirina, para calmar un dolor, para taparlo, para no sentirlo. Nos aturdimos, nos distraemos ¿Quién no lo hace?
¿Pero qué pasaría si nos animáramos y por un ratito, al menos por un ratito, dejáramos de lado nuestro soma? Todas esas cosas que nos aturden, que nos distraen, que nos adormecen ¿Qué pasaría?


Si dejáramos nuestros somas nos encontraríamos a nosotros mismos


Dejaríamos de huir de nosotros, de nuestra piel, de nuestro deseo.
¿Qué pasaría si dejáramos de aturdirnos con lo urgente, con el incendio, y nos ocupáramos de lo importante?
 No digo que no duela, claro que duele dejar tu soma. Debajo del soma, tapado, está lo que somos y lo que sentimos te guste o no.

 Y para mí, mi opinión, es que lo más importante y lo que mejor que puede hacer uno es ser fiel a uno mismo.